El limoncello es una de las bebidas más representativas de Italia en el mundo. Sin embargo, su producción no es solamente un lujo que se puede disfrutar principalmente en la costa amalfitana. En Tucumán, Iltico nos deleita con este licor tradicional utilizando los tan característicos limones de nuestra provincia.
¿Cuál es el origen del limoncello?
Se trata de un licor obtenido por medio de la maceración en alcohol de las cascaras de limones – algunas variantes utilizan incluso cascaras de otros cítricos- a la que se le agrega almíbar, producto de la combinación de azúcar y agua.
Sus orígenes están mezclados con la leyenda. Se dice que nace a principios del 1900 en una pequeña casa de la Isola Azzurra, donde la señora María Antonia Farace cultivaba un jardín lleno de árboles de limón y de naranja. Su nieto, después de la guerra, abrió un bar cuya especialidad era el licor de limón realizado con la antigua receta de su abuela. Más adelante, su hijo empezó una pequeña producción artesanal de limoncello, registrando la marca. No obstante, existen historias sobre la creación de esta bebida en otros lugares de Italia, como por ejemplo en Sorrento y Amalfi.
¿Cómo comenzó?
Nicolas Silvetti es uno de los protagonistas de esta empresa que lleva los limones tucumanos a un nuevo nivel. Comienza contándonos que su familia es italiana, y que vivían en el sur de la provincia. La idea original de este emprendimiento surgió con su tío, quien vivió 35 años en Roma. Estando en la Costa Amalfitana, probó el tan conocido limoncello, impactado, empezó a indagar sobre el proceso de fabricación. Luego de jubilarse en Italia, se decidió a instalar una fabrica de limoncello en Tucumán, convencido de que la calidad de nuestros limones sería perfecta para la producción de este licor. Fue así como trajo equipos y se instaló en Buenos Aires.
“Él tenía su propia marca, y yo lo ayudaba distribuyendo su limoncello en el NOA. Más adelante decidí priorizar mis estudios y dejé de trabajar en eso. Hace cuatro o cinco años surgió la posibilidad de abrir la fábrica en Tucumán, junto a mi socio Fabricio Pistolesi” nos cuenta Nicolás.
De Tucumán al mundo
Nicolás agrega que todo arrancó con la remodelación de un local en Tafí Viejo, donde armaron una pequeña fabrica boutique, como comúnmente se encuentran en Italia, y donde se producen licores de alta calidad. Desde entonces, quedó como un legado familiar.
“La producción de invierno es siempre más sabrosa que la de otros períodos, esto se debe a que el limón es de estación. El proceso consiste en cosecharlos, lavarlos, secarlos y pelarlos a mano, todo artesanal, luego los ponemos en alcohol y por una cuestión de densidades, el color y el sabor del limón se transfieren al mismo, que adquiere un color amarillo intenso. Actualmente enviamos muestras de nuestra producción a varios países ya que uno de nuestros objetivos es empezar a exportar” comenta.
La revolución de Iltico
Nicolás agrega como dato curioso, que Iltico es el nombre de una localidad ubicada en el departamento de Chicligasta, en el sur tucumano. “Cuando los habitantes de este lugar se enteraron de que nuestro limoncello llevaba su nombre, se emocionaron y nos dieron todo su apoyo, incluso quieren que seamos el sponsor de su equipo de futbol. La gente está encantada con nuestro producto” añade Nicolas.
Iltico nos presenta múltiples propuestas para utilizar el limoncello, como tragos y postres. Consiguen acercar este tradicional producto italiano a todos los tucumanos pero elaborado 100% con materia prima local.
Autor imagen de portada: Facebook Iltico.