Matteo Tarquini: la estadística y los videojuegos al aula

Matteo Tarquini vivió gran parte de su vida en Italia, pero desde hace seis años reside en Tucumán. Le interesan la psicología, la estadística aplicada y la educación. Además, hoy es director de la primera escuela secundaria gestionada directamente por una Universidad privada en todo el norte argentino.

Una formación que comenzó en Roma y continuó en Tucumán

Matteo nació el 17 de septiembre de 1986 en Chiusi, provincia de Siena. Hasta sus 18 años vivió en Chianciano Terme, un pueblo turístico de la región de la Toscana conocido por sus termas y por el deslumbrante Valle de Orcia. De hecho, nos confiesa que de todos los lugares de Tucumán, Tafí del Valle es uno de los que más le gustan, precisamente porque el paisaje le recuerda al bello lugar en el que pasó varios años de su vida.
Al empezar su vida universitaria se trasladó a Roma, y en la Universidad de La Sapienza optó por estudiar psicología. Después de obtener el título de grado, Matteo debía hacer una pasantía en Tucumán. En teoría la provincia se volvería su hogar por solo seis meses. Sin embargo, la casualidad (o el destino) cambiaron esos planes: la estadía se extendió porque a los diez días de llegar aquí, conoció a Sol, de quien se enamoró. Por si se lo preguntan, el final de esa historia es feliz: hoy están casados.

Viviendo ya en nuestra provincia, continuó estudiando en la Universidad Nacional de Tucumán. Al día de hoy es doctorando en Ciencias de la Educación, y solo le falta rendir la tesis para ser Magister en Estadística Aplicada. Además, ejerce como Director del Instituto Preuniversitario (IPre) de la Universidad San Pablo T, que se inauguró este año. Matteo nos cuenta que es la primera escuela secundaria gestionada directamente por una Universidad privada en todo el norte argentino.

Como educador, Matteo Tarquini se preocupa por el aprendizaje significativo 

Decidimos indagar un poco más en las ideas que Matteo tiene como educador, ya que son verdaderamente interesantes e innovadoras. Nos habló sobre el Instituto del cual es director y sobre un proyecto en el que viene trabajando hace dos años. Su entusiasmo al respecto es evidente.
Respecto al Instituto Preuniversitario de la Universidad San Pablo T, Matteo cuenta que “el IPre nace en 2020 con la voluntad de empujar una innovación en la educación que fortalezca la autonomía de los estudiantes y la interdisciplinariedad de la propuesta didáctica“. Asi, por ejemplo, en la escuela no hay timbre, algunas clases son dictadas por más de un profesor al mismo tiempo y se trabaja a partir de proyectos interdisciplinarios, “que dan cuenta de la complejidad del saber y de las relaciones constantes e inseparables entre los diferentes espacios curriculares”.

Además comenta que en el IPre “apuntamos al desarrollo de competencias y habilidades específicas y transversales que permitan a los alumnos fortalecer sus capacidades críticas. Tratamos de tener una mirada tanto al contexto local como al global, abordando problemáticas y saberes fundamentales en estos tiempos. Los alumnos estudian portugués e inglés, y tienen una amplia propuesta de actividades de tipo artístico. Ahora, por ejemplo, los alumnos están armando una revista digital, cuyo primer número contendrá sus producciones sobre el tema <Sociedad, territorio y medioambiente>”.

“Estoy convencido de que se pueden aprender muchísimas cosas de los videojuegos”

Matteo Tarquini, en su faceta de docente se muestra preocupado por innovar y adaptarse a los tiempos que corren. En ese sentido es que  propone “gamificar el aula”. Al respecto comenta:
“Estoy convencido de que se pueden aprender muchísimas cosas de los videojuegos. Jugando desarrollamos habilidades complejas, superando desafíos que nos obligan a organizar estrategias, resolver problemas, interpretar información presentada como textos, gráficos o tablas. Usualmente nos parecen aburridas en la escuela pero adquieren toda otra dimensión en el contexto lúdico. Lograr explotar estas potencialidades en el aula significa producir aprendizajes significativos y duraderos y favorecer el desarrollo de habilidades que son transversales a todos los espacios curriculares y fundamentales para el mundo del trabajo y la vida cotidiana en general”.

“Los videojuegos tienen la ventaja de vincular la información con la acción”

“En una propuesta que voy llevando adelante ya desde hace dos años busco enseñar la estadística a partir de los videojuegos. Juegos como Plague Inc. (super actual en este momento, ya que el objetivo del juego es desarrollar un virus para infectar a todo el mundo) o incluso el mismo FIFA o PES “obligan” al jugador a que entienda gráficos complejos, en donde se representan datos de manera georreferenciada o en donde las estadísticas de un jugador están representadas como un gráfico de tipo radar. Suponen el desarrollo de cierto pensamiento estadístico para que puedan emplearse de manera provechosa para mejorar en el juego”.
“Los videojuegos, además, tienen la gran ventaja de vincular claramente la información con la acción, mostrando cómo lo aprendido tiene una relación directa con lo que se hace en el juego, saliendo de esa abstracción del saber desde la vida real que lamentablemente se nota en algunas propuestas didácticas”.

Nuestro entrevistado nos invita a seguir el trabajo de dos colegas suyos: Maria Belén Parra (profesora de Ciencias Naturales) y Blas de Haro Barbas (doctor en Física), ambos tucumanos que desarrollan juegos de mesa para enseñar ciencias naturales y física en escuelas secundarias. Comenta Matteo que Blas, además, ludificó sus clases de física en la UTN, contextualizándolas en el mundo de Star Wars.

“En Toscana somos un poco más fríos que los argentinos, asi que me costó acostumbrarme a tantos abrazos”

Le preguntamos a Matteo si hay algo que extrañe de Italia, y admite que si: la cocina de su abuela y de su madre, a su familia y algunos amigos. También anhela esos veranos que duran 3 o 4 meses, en los que la temperatura rara vez llega a 40 grados (como acá). Por otro lado, no dejó de interesarse por la política y la movida cultural y social de allá.
En cuanto a si encuentra grandes diferencias a nivel cultural y si mantiene o no costumbres traídas del país europeo, Matteo advierte que “no existen diferencias muy marcadas a nivel de costumbres entre Italia (por lo menos la zona en donde vivía yo) y Argentina, así que diría que no hay alguna costumbre particular que siga manteniendo. Lo que sí es cierto es que en Toscana somos un poco más fríos que los argentinos, así que me costó acostumbrarme a tantos abrazos o a que las personas que te caigan a la casa sin avisar antes”. Seguramente tiene razón, ¿no somos muy confianzudos los tucumanos?

No queríamos dejar de preguntarle sobre sus hobbies. Nos contó que dedica mucho tiempo a la lectura: es fanático de las historietas. Calcula que debe tener alrededor de diez mil volúmenes entre Chianciano y Tucumán. Además, disfruta de jugar videojuegos, ver películas y series (¡es de los tantos que aún siguen dolidos por el final de Lost!). De vez en cuando mira los partidos del Inter de Milán, el club del cual es hincha desde pequeño.
¡Agradecemos a Matteo por aceptar la invitación a ser entrevistado para itTucumán.it!

Photo Credit de imagen de portada: Matteo Tarquini.